Primera frase

Comentario primera frase

El titular ha cumplido su función de detener al lector con una promesa cautivadora. A continuación, pasa a leer la frase o el párrafo inicial, que es donde se le convence para que siga leyendo.

Así que, como una cascada que comienza con el titular, el siguiente objetivo es conseguir que lean la primera frase. A continuación, tu único objetivo tras la primera frase es conseguir que lean la segunda, y así sucesivamente.

También puede proyectar el futuro dibujando en la mente del lector cómo sería su vida si cumpliera la promesa que hizo en el titular. Utilice palabras como «Imagínese cuando…».

Abrir con una analogía puede ser muy poderoso, ya que se trata de una comparación de dos cosas diferentes que tienen algunas similitudes. Algo como «Su mano estaba tan fría como el hielo» o «Eres tan molesto como clavos en una pizarra».

Por otro lado, una metáfora poderosa puede hacer el truco. Una metáfora hace una comparación entre dos cosas que no son iguales pero que tienen algo en común. Dos ejemplos: «La risa es la música del alma» o «Las cicatrices son el mapa del alma».

¿Cuál es una buena primera frase?

Empieza con la persecución. Un buen gancho también puede ser una pregunta o una afirmación: cualquier cosa que provoque una respuesta emocional en el lector. Piénselo de esta manera: una buena frase inicial es aquello que no cree que pueda decir, pero que aun así quiere decir. Por ejemplo: «Este libro cambiará tu vida».

¿Cuál es una buena primera frase para empezar?

A continuación encontrará una lista de posibles palabras de inicio de frase, de transición y de otro tipo que pueden resultarle útiles. En este ensayo se analiza … … se explora … … se define … Se dará la definición de … … se esboza brevemente … … se explora … El tema se centra en …. … se demuestra … … se incluye …

Primera frase de una historia

«Las primeras frases son puertas a mundos», escribió Ursula Le Guin en su ensayo La hija de la pescadora. Es decir: en manos de nuestros mejores escritores, las primeras frases hechizan de inmediato, captan la atención como un pistoletazo de salida, marcan el tono e incluso presagian lo que está por venir.

Hemos seleccionado 18 de nuestras primeras frases de ficción favoritas. No es una lista exhaustiva -hay demasiadas frases de apertura exquisitas en la literatura como para darles cabida a todas-, pero éstas son algunas de las que nos resulta difícil olvidar.

El Rey ha muerto. Larga vida a la Reina». La voz del locutor crepita en la radio y serpentea alrededor de los embelesados clientes del Milk Bar de Berlín tan sinuosamente como la niebla se enrosca alrededor de las lúgubres farolas, cuyo débil resplandor apenas ilumina los adoquines.

Había una vez cuatro niños que se llamaban Peter, Susan, Edmund y Lucy. Esta historia trata de algo que les ocurrió cuando los enviaron lejos de Londres durante la guerra a causa de los ataques aéreos.

¿Has leído un periódico últimamente? Es difícil no estar de acuerdo, a veces, con esta frase de la segunda entrega de la trilogía Guía del autoestopista galáctico de Douglas Adams. Y si no estás de acuerdo (el universo al menos nos dio amor, ¿no?), te hará reír.

Análisis del ejemplo de frase introductoria

En un primer párrafo bien construido, esa primera frase da paso a tres o cuatro oraciones que proporcionan detalles sobre el tema que se aborda en el cuerpo del ensayo. Estas frases también deben sentar las bases de la tesis.

Escribir un buen enunciado de tesis es objeto de mucha instrucción y formación, ya que es el motor de tu investigación y el tema de tu ensayo. La totalidad del trabajo depende de esa frase, que suele ser la última del párrafo introductorio y se va perfeccionando a lo largo de las fases de investigación y redacción.

A menudo es más fácil escribir el párrafo introductorio después de haber redactado el primer borrador de la parte principal del trabajo (o al menos haber esbozado un esquema detallado, sección por sección o párrafo por párrafo). Después de la fase de redacción, la investigación y los puntos principales están frescos en la mente y la declaración de la tesis se ha pulido hasta dejarla reluciente. Normalmente se perfecciona durante la fase de redacción, ya que la investigación puede haber hecho necesario su ajuste.

Primera frase de un párrafo

Al principio de una obra escrita se sitúa la frase inicial o línea de apertura. La frase inicial es una parte o la totalidad de la oración inicial que puede dar comienzo al párrafo principal. En los textos antiguos se utiliza el término latino «incipit» (comienza) para las primeras palabras de la frase inicial[cita requerida].

Al igual que en el habla, un documento personal como una carta suele comenzar con un saludo; sin embargo, no suele ser el caso en documentos, artículos, ensayos, poesía, letras de canciones y obras generales de ficción y no ficción. En las obras de no ficción, la frase inicial suele apuntar directamente al tema que se está tratando. En el periodismo, la frase inicial suele exponer el alcance del artículo.

Entre las técnicas para captar la atención del lector se encuentran: ir al grano, mostrar actitud, impactar y ser polémico[2][3] Una de las frases de apertura más famosas, «Era el mejor de los tiempos, era el peor de los tiempos…», inicia una frase de 118 palabras[4] que atrae al lector por su contradicción; la primera frase de Sí incluso contiene 477 palabras. «Llámame Ismael» es un ejemplo de frase inicial corta. Por lo general, se evitan las aperturas formulistas, pero son esperables en ciertos géneros, como los cuentos de hadas que empiezan «Érase una vez…».